CiudadBqto ¡Na' Guará!
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Como habíamos previsto, ya en este momento es un hecho concreto la consolidación de la Asamblea Nacional Constituyente y todo lo que implica su acto de instalación formal, a efecto de iniciar todo un proceso de revisión y reconsideración de lo que debe cambiarse e incorporarse a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999.
Sin embargo, no podemos dejar pasar por alto todo el heroísmo expresado por el pueblo venezolano. Este heroísmo se manifiesta de diversas maneras y constituye un reconocimiento al legado de Chávez. Resaltamos en primer lugar la alta votación obtenida, a pesar del asedio a que fue sometido gran parte de los electores, en aquellos municipios donde el terrorismo había sentado su poder. Ríos de pueblos se desbordaron, atravesando múltiples obstáculos, barricadas y bandas armadas, que por todos los medios trataban de impedir el cumplimiento del deber y el derecho a votar.
No es exagerado decir que en los anales históricos de Venezuela y el mundo no se había producido un hecho similar, incluso en muchos países los niveles de abstención son altísimos. A los ojos de la derecha nacional e internacional es incomprensible como un pueblo que tiene varios años azotado por una guerra económica, con desabastecimiento y escasez de variados productos alimenticios y medicinas, un pueblo que durante todo este año 2017 ha vivido en un estado de guerra, a través de guarimbas terroristas, que impiden su derecho al libre tránsito, pueda entender que el proceso constituyente es el único camino a la paz y con una claridad meridiana, le envía un mensaje al mundo en cuanto a su nivel de conciencia y de formación.
Por otro lado, hay que ver los videos de los pueblos andinos, permanentes nidos de paramilitares colombianos, aliados con la derecha nacional, desafiar las balas y en oleadas se lanzaron a las aguas del rio Torbes y atravesaron montañas, para ejercer su derecho al voto y decirle al terrorismo que ya basta de agresiones y que aquí está un pueblo dispuesto a defender su sagrado derecho a la convivencia pacífica.
Para todos los que por decisión popular vamos a formar parte de esta Magna Asamblea Nacional Constituyente, lo anterior es un obligado compromiso con ese pueblo, no debemos ni podemos fallarle o la historia y la memoria del comandante Chávez nos lo cobrará con toda su contundencia. Esta decisión es un mandato ineludible para derrotar la especulación, el terrorismo, el burocratismo, la ineficiencia y la indolencia con la que actúan muchos funcionarios de todos los niveles. Tenemos que tomar el toro por los cuernos y abatir a los bachaqueros pequeños, medianos y gigantes, que se han confabulado para matar de hambre al pueblo venezolano. Son muchos los retos que tenemos ante un pueblo expectante, que nos ha dado un nuevo plazo para cumplirle y ser leales a Chávez. El enemigo externo lo tenemos acorralado, debilitado y desconcertado. Concentrémonos en el enemigo interno, representado por una pesada carga burocrática que nos impide avanzar. Asumamos ese reto con coraje y honradez. No es mucho pedir.
JULIO CHAVEZ
